Parece que la propia morena se dio cuenta de que un entrenador satisfecho es un buen entrenador. No tardó mucho en volverse convencional... La entrenadora lameculos también se encontró rápidamente. Así que el entrenador ni siquiera tuvo que desabrocharse los pantalones: la chica se encargó de hacerlo ella misma. Me encanta este tipo de deportes estudiantiles avanzados. )
La chica pelirroja sirvió al negro de gran polla al máximo. Cuando se la metió en la boca, pensé que le iba a hacer un agujero en la nuca. Tan grande que ni siquiera pudo tragárselo entero.